
Hemos llegado a las 8 de la mañana a trabajar y en el momento de la foto son las doce de la noche, se ha acabado la coca-cola de la sala, las galletas de chocolate y las pastitas saladas. 16 horas delante de una pantalla son demasiadas, aun no sabemos cuando acabaremos.
No hay comentarios:
Publicar un comentario